Un tipo con suerte

Jon Gruden es un cabrón suertudo. El día de ayer, a falta de 8 segundos, los Lions amenazaban en la 1 de los Raiders en cuarto down, después de que una jugada anterior se quedaron a punto de anotar por la misma distancia. No tenían tiempos muertos. ¿Y qué paso, qué hizo John Gruden? Lo que todo mundo se esperaba: pedir un tiempo muerto para que los Leones se organizaran. Oakland ganó el partido, un par de jugadas de defensivos controversiales detuvo el pase de Matt Stafford y la decisión pareció una genialidad. Pero claro que si hubiera recibido la anotación, Gruden sería muy críticado el día de hoy.

Y es por eso que les digo, Gruden, el muñeco diabólico, volvió a sonreír, chocando las manos de los fanáticos de los Riaders. Es el tipo que se merecen los Raiders en la banda. Y un tipo con mucha suerte. Ha sido suerte que tres de los partidos que han ganado en  la presente temporada han sido gracias a jugadas de la defensiva secundaria, (la peor unidad del equipo). Ha perdido a dos jugadores titulares de su línea ofensiva, perdió por suspensión para todo el año a su LB interno dejando un boquete por el centro. Su mejor jugador ofensivo renunció dos días antes del inicio de la temporada. Tres de las cuatro derrotas han sido masacres al por mayor. Perdió a uno de sus primeras selecciones de primera ronda en la primera jornada. Han tenido un calendario brutal, y juegan en la misma división que Patrick Mahomes. Y con todo lo que les estoy diciendo, van 4-4 y con aspiraciones de pelear por un boleto comodín en la devaluada AFC. 


Es un tipo con suerte porque no ha hecho nada los últimos 10 años de su vida, (NADA), que lo convirtiera en merecedor de un contrato de 100 millones de dólares. Es un tipo con suerte que sus decisiones controversiales como la contratación de Mike Mayock, el trade de Khalil Mack o el de Amari Cooper; un tipo que sus decisiones polémicas de draft están funcionando, y hasta sus novatos no drafteados están yendo un paso hacia adelante. Pero, ¿Suerte o genialidad?

Porque si algo han demostrado estos Raiders es que están bien entrenados: cuando los ves jugar sabes que no es una banda o un conjunto de tipos talentosos, es una franquicia donde hay estrategia, búsqueda de identidad, y las ideas bien puestas, hay una falta de talento, si, y están a uno o dos años de ser un contendiente, pero Gruden está demostrando una frialdad y un cálculo de toma de decisiones envidiable. Y no hay que equivocarnos: Jon Gruden no ha cambiado nada. Tanto sus primeros Raiders como sus Bucs eran equipos con defensas portentosas y ataques consistentes. El rendimiento de esta versión del 2019 no me ha sorprendido nada, al contrario, era lo que te esperabas al verlos jugar el año pasado, a otros les podría parecer sorprendente el poco o mucho temple que ha demostrado Gruden a lo largo del 2019, pero en eso tampoco se equivoquen: en el fondo, Gruden sigue siendo el mismo chiflado, que el, a manera de freno personal, decidió poner en Mike Mayock alguien que lo detuviera de cometer los mismos errores tremendos que cometió con los Bucs. 

El partido de ayer fue bonito. Lions y Raiders nos regalaron un juego muy emocionante y por ahora el mejor de la jornada, plagado de buenas jugadas a ambos lados del balón y dos quarterbacks en su punto que tomaron decisiones geniales durante todo el partido. Al final fueron los Raiders, los que se arriesgaron un poco mas en la banda, pidiendo tiempos muertos innecesarios, mandando jugadas trampa, acarreos con el fullback, los que se llevaron la victoria. Un año después de haber canjeado a uno de los mejores jugadores defensivos de la liga, a uno de los mejores receptores abiertos a lo profundo, sigue Gruden sonriendo, relamiéndose los dedos al ver como su selección de primera ronda del año próximo crece, que tiene un draft entero para terminar de reconstruir el equipo y muchísimo dinero. Cual niño chiquito espera fervientemente su momento. Pero este plan que tiene, que ha hecho hasta ahora, no es algo muy sólido, de echo es todo lo contrario: así como puede salir muy bien como lo está haciendo, puede salir rematadamente mal, no hay punto medio. 


En el fondo Gruden no ha cambiado, sigue siendo un cabrón al que la vida le importa poco, pero que tiene mucha suerte.

Correo: franciscolozano321@gmail.com / Twitter: @nflagainst/ Facebook: NFL against the world

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