Una obra maestra

Y ahora el inicio de la campaña 2019, así de fácil, así de rápido, la temporada 2018 se acabó. A menos que seas fanático del equipo campeón, ya estás esperando Abril y con ello el draft. Minutos después del pitido final de la Super Bowl las cuentas de twitter de varios equipos ya estaban posteando que la temporada 2019 estaba en marcha. Así de efímera y de veloz es la NFL actual.


Una manera perfecta de resumir la temporada del 2018, si me lo preguntan. En la época de la posmodernidad, el imperio de lo efímero, la velocidad de lo que se ve. El contenido de las cosas ya no parece ser tan importante, ¿no es esa la filosofía de páginas como twitter o instagram? Lugares donde vemos miles de millones de actualizaciones en segundos, donde inclusive las noticias están programadas para tener una corta vida, un suspiro que apenas minutos u horas después desaparecerán de la faz de la tierra (o al menos lo que alcanzamos a ver), cada vez percibimos más, cada vez podemos tener acceso a más información. Y, curiosamente, cada vez nos sentimos menos satisfechos. Es también la era de la desesperación, del aburrimiento, del tedio, entre los mares y corrientes que nunca se detienen, nuestra humanidad se siente terminada, acechadas y superada de tanta información, a veces solo queremos tener un minuto de paz, donde el tiempo no importe y donde no veamos nada más.


Esto, mis queridos lectores y amigos, también sucede en la NFL. Dije hace unos días que me parecía una temporada muy agridulce, y era en parte porque en la ola de emociones fuertes que vivimos, veíamos muy pocas veces. Desde hace años los cambios de reglamentos de la NFL parecía que buscaban la perfección ofensiva, este 2018-2019 pudo ser una culminación de esa exploración. Vimos anotaciones al por mayor, ofensivas que hacían lo que querían, defensivas siendo pistoeadas una y otra vez, anotadores elevadísimos, más de sesenta puntos por partido en muchos casos. Y eran tantas las anotaciones que hasta un cierto punto ya no interesaban mucho. Todo en exceso desespera y aunque disfrutamos mucho el 54-51, tal vez no lo seguiremos haciendo durante mucho tiempo.

Es por eso que el Super Bowl fue tan extraño y curioso. En una era donde tres equipos superaron los 500 puntos anotados durante la campaña, donde vimos tantas anotaciones de tantas maneras, tuvimos el Super Bowl con la anotación más baja de la historia: tan solo 16 puntos. Y desde luego las redes sociales estaban incrédulos, esperaban un asalto ofensivo, un partido enorme, una fiesta de puntos con marcadores de 37-30 o algo por el estilo, y en vez de eso obtuvieron un juego de otras épocas, de otras dimensiones ya muy lejanas y que solo los más grandes y amantes del juego pueden recordar. ¿Qué nos quiere decir esto? Que con todos los cambios en el reglamento, los intentos de la NFL de volver el deporte cada vez más un espectáculo, con todo eso y más, en el fondo, la naturaleza, la manera en que se hacen las cosas, es un solo camino, y no hay más. Esta es la realidad del football americano, por más fuegos artificiales que veamos, al final son los detalles, la tierra y las buenas defensas las que triunfan. Por ello el Super Bowl LIII es la obra maestra de Bill Belichick, nos demostró, y en el partido grande, de que va esto.


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Haciendo un punto y aparte, como ya lo han notado el blog ha sufrido un cambio de su imagen, así mismo han aparecido nuevas opciones: si buscan en la esquina superior izquierda verán tres rayitas, es otro menú que al desplegarlo podrán tener acceso directo a la página de Facebook, la cuenta de Twitter y de Instagram oficial. Todo esto con el fin de hacer para ustedes una experiencia mas completa, en todas las cuentas se publicarán y manejarán contenidos diferentes. En el caso del Twitter dejaré de usar mi cuenta personal para usar la nueva: @nflagainst por si alguien le interesa estar mas al tanto. Así mismo he organizado las entradas publicadas hasta el momento por equipos y fecha, por si alguien le interesa leer alguna nota en específico o quiere buscar algo acerca de un cierto tema siempre puede buscarla. 

Correo: franciscolozano1321@gmail.com / Twitter: @clarkmorales / Facebook: NFL against the world

Comentarios

  1. Fue una SB en la que dos defensas extraordinarias consiguieron hacer que pareciera que habíamos vuelto a los años setenta.
    Sin duda, la obra de arte que William Stephen Belichick deja a la posteridad... ganando con el football que mamó de su padre.

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