Pittsburgh Steelers (Previa)

Hace poco volví a revisar la final de conferencia de la AFC del año 2011, aquella donde los Steelers se impusieron 24-19 a los Jets en un juego muy cerrado que a los de la gran manzana solo les faltó tiempo, suerte y un buen mariscal para terminar de vencerlos. En fin, aquel juego el equipo de los acereros dio una tremenda primera mitad. Dos cuartos de para mi lo que este equipo representa: un juego terrestre que se abre pasos agigantados cuando quieren (mas de lo que pueden), un ataque aéreo que es capaz de romper las defensas en un parpadeo. Un quarterback que busca milagros y se apoya en cuanto lo quieren los dioses.  Una línea parchada pero poderosa cuando se lo propone y una defensiva orgullosa, imponente.






Esos eran los Steelers, un equipo grande, oportunista y que sobre todo trabajaban a base de amor por el juego físico. Por que nadie me diga que aquellos playoffs, o los del 2008 o los del 2005 fueron especialmente brillantes, pero a final de cuentas el orgullo de la franquicia, la tradición y la costumbre prevaleció para llevarlos de nuevo hasta el podio mas alto de la NFL.

Pero desde entonces Mike Tomlin se ha dedicado a destruir un equipo, a quitarle sus elementos principales y hacerlo ver como un chiste. Le ha quitado el cañón a Big Ben, el lugar de ataque terrestre amartillante, ahora todo se busca ganar en un KO y la defensiva solo debe robar balones y buscar que no anoten mucho. Y la verdad es que se nota mucho, se ha convertido en una franquicia con la moral muy baja, básicamente solo necesitas ganarles el primer cuarto anímicamente y no necesitarás mas. Lo hicieron los Ravens, los Patriots y los Dolphins. A mi si me lo preguntan, (claro es una frase retórica) sus problemas son sus cimientos: aguantaron muchísimo a los veteranos en los últimos años hasta que no dieron para mas y ahora ya no tienen quien cubrir las bajas: puedo asegurar que extrañan, y mucho a Heath Miller, a Troy Polamalu, a Ike Lewis, a Ryan Clark, a Lamarr Woodley, entre otros. Para mi los Steelers son como un pastel hermoso que su betún es de las cosas mas sabrosas del mundo que te chupas los dedos, pero cuando lo partes y quieres llegar a la parte del pan descubres que sabe muy mal y el pastel se siente medio vacío. Pues es lo mismo: después de su gran ataque aéreo y su eficiente juego de carrera no hay mucho.


Y ahora diré: me voy a extender, y mucho en el siguiente punto. Yo tengo un gran problema con Ben Roethlisberger: desde que Todd Haley es el coordinador ofensivo del equipo su rendimiento estadístico ha mejorado, pero a la vez es un jugador con la moral mucho mas baja, que ya no es tan seguro de si mismo, que ya no intenta hacer nada extraordinario o correr en una 3 & 18. Por que Big Ben no era de esos, era de los que sacaban genialidades cuando nadie mas lo hacía y cuando se le necesitaba Ahora lo han domado y hace lo que el libro dice. La cosa es que se nota a leguas que Big Ben no es un jugador de ese estilo. Es uno de los que debes darle pie a la improvisación, a que haga lo que quiera hacer y que tenga esa libertad, es ahí donde sacará cosas brillantes como el pase a Antonio Brown en la divisional contra los Ravens. Big Ben ha ganado dos anillos y si me lo preguntan lo ha hecho justamente: he defendido muchas veces la idea que el super bowl XL, aparte de aburrido fue robado. Pero eso no quita el echo de que jugó unos excelentes playoffs. Así mismo en el 2008 aunque muchos recuerden la atrapada de Santonio Holmes el verdadero genio en aquel drive fue su quarterback, con su frialdad, su genialidad y su alegría por jugar. Sin embargo desde la salida de Arians, (que después el crecimiento de Andrew Luck y de Carson Palmer me he darme cuenta del gran entrenador ofensivo que es), Big Ben se la ha visto sin ser el mismo de antes, sin esa confianza.


Los primeros años con su nuevo coordinador ofensivo ciertamente fueron muy difíciles: no se querían entre ellos y no se entendían. Pero era por que querían hacer con los mismos elementos de la época de Arians otro equipo. Es como decir que los miembros de una banda de rock and roll tienen la capacidad y por eso harán música de orquesta. Al parecer sin embargo la directiva entendió el asunto y fueron cambiando todo: trajeron a Le’veon Bell. Le dieron rienda suelta a Antonio Brown, le trajeron a mas línea ofensiva y el equipo se hizo muy diferente. A mi en lo personal no me gusta, no se me hace una unidad especializada y con enjundia, muy espectacular pero con muy poca eficacia.
El otro problema respecto a Big Ben radica en que el tipo ya tiene 36 años y ya ha hablado de su retiro en los últimos meses. Los Steelers deben saber que su QB no es eterno y probablemente se acerque el momento de su retiro.

La otra cuestión es que muchos están muy emocionados con el futuro del equipo pero yo avecino una reconstrucción muy fuerte: Big Ben como ya dije es muy grande. Bell lo mas seguro es que llegará a la free agency el año siguiente y Antonio Brown se va a quedar muy solo. Uno dirá que, pues un buen equipo debe de tener planes de contingencia: a los Steelers desactívales a Bell o a Big Ben y no tienen nada. Así de extremista.

Entrando a la plantilla del equipo ya dije lo suficiente de Big Ben, sus reemplazos son Landry Jones quien en poco mas de dos años no ha demostrado lo suficiente como para ser el futuro, y Joshua Dobbs es un novato de cuarta ronda que ha levantado especulación.

El grupo de corredores está conformado por Le’Veon Bell. A mi sinceramente no me gusta el como corredor. Lleva cuatro años de estar rompiéndola, pero no creo que sus tobillos sigan aguantando mucho tiempo mas. Además su carga de trabajo es sorprendente: el año pasado tuvo mas de 330 toques de balón. Es sorprendente y demasiado, un ser humano no puede ser explotado tanto tiempo y rendir al mismo nivel. Sus reemplazos serán Knile Davis quien nunca ha sido mucho y Fitzgerald Toussaint para las yardas difíciles. En teoría deben formar un grupo de RB muy competitivo, pero les pasa lo mismo que a los Broncos: sin Bell no hay mucho mas.


El grupo de WR es mas de lo mismo. Empecemos por el echo de que no hay receptor perfecto. Clavin Johnson, Julio Jones, A.J. Green, Randy Moss… todos han sido silenciados aunque sea una vez. Brown se quedó sin nada que decir el año pasado varias veces. También estará Martavius Bryant quien se espera que por fin de ese salto de calidad de un segundo receptor que no se siente desde la partida de Emmanuel Sanders. Regresa Eli Rogers a su segundo año esperando formar un trio potente. El grupo lo completa Darrius Hayward-Bay quien nunca ha sido un gran jugador y el recién drafteado de segunda ronda: Juju Smith-Schuster quien espera formar un grupo polivalente y bastante peligroso de receptores abiertos. La posición de ala cerrada sin embargo es preocupante, desde la partida de Miller Big Ben no tiene a quien mirar en corto. Sin embargo se espera que Jesse James de ese salto de calidad que el equipo confía. Sinceramente, este grupo sin Antonio Brown no parece ser nada del otro mundo. Es como Stafford cuando jugaba Megatron: se encasillaba tanto con el que cuando necesitaba otros objetivos no eran tan seguros.

La línea repite y eso es excelente: Alejandro Villanueva y Marcus Gilbert repiten como tackles, David DeCastro y Ramon Foster regresan como guardias y el center será Maurkice Poncey quien al parecer después de varios años ha logrado superar sus problemas con su salud. Todos juntos hicieron una gran temporada el año pasado y pueden ser una barrera. Después de tantos años y problemas al fin lograron solucionarlo de una gran manera, de lo mejor del equipo.

Ahora la defensiva. Y aquí va mi argumento contra Tomlin: podrán decir lo que quieran, pero Cowher nunca rebajó a un nivel en donde dejaba la defensiva tan pobre. La falta de fundamentos para el tackleo, en coberturas, en la sincronía, en efectividad… a mi esta defensiva ya me ha decepcionado lo suficiente. Como dije arriba y he dicho varias veces el equipo no ha sabido renovarse bien.

La línea que en años anteriores era temible estará compuesta por Cameron Hayward quien ha dejado a deber, solo por mencionar un dato: ha tenido temporadas de apenas 3 sacks. El otro DE debe ser Stephen Tuitt o Tyson Alualu. Javon Hargrave repite como NT. Todos se combinaron para menos de 13 sacks el año pasado. Von Miller, el solo, tuvo 13.5 sacks el año pasado.


El grupo de LB, tan potente, tan orgullo de otros años se quedó sin Lawrence Timmons quien a ese si, y lo doy por seguro, ese si que lo van a extrañar y mucho. Uno de los mejores LB de toda la liga. Atrás han quedado los días de James Farrior y Larry Foote. Ahora estarán Ryan Shazier y Vince Williams. A mi me parecen unos potenciales macgníficos para ser apoyadores centrales, son envidiables y muy seguros. Pero se necesita que aprendan a estar sanos. El máximo problema de los Steelers es encontrar una herencia a Lamarr Woodley y James Harrison. Se que el segundo sigue jugando pero ya no da, en teoría, para mas, o al menos no tanto como en sus años mozos. El experimento de Jarvis Jones fracasó y ahora tienen fe en Bud Dupree quien ha mostrado destellos. Para enocntrar sustituto a Harrison, o por si falla Dupree, usaron su primera selección con el hermano de J.J. Watt: T.J. Watt, quien se dice que es una verdadera bestia. Hasta no ver para creer que lo mismo decían de Heyward, pero espero que por fin hayan encontrado la solución a los problemas del apartado.

Me parece que, por puro potencial, los Steelers tienen un grupo de apoyadores excelente, pero falta ver como maduraran este año.

Lo que no tengo ninguna duda es que la secundaria puede volver a ser un desastre como el año pasado. Tuvieron solo 13 intercepciones y 5 de ellas fueron de sus apoyadores. Sus cornerbacks son Artie Burns y el veterano William Gay. Gastaron además selecciones de tercera y quinta ronda en reforzar este apartado con Cameron Sutton y Brian Allen. Muchos nombres, poca calidad. Los safetys serán Mike Mitchell y Sean Davis, de lo poco que funcionó el año pasado. Yo no veo un gran salto de calidad en comparación a lo que vimos el 2016.


El kicker será de nuevo Chris Boswell quien tuvo una buena temporada el año pasado, (con todo y la rabona en el juego contra los Ravens), también repite Jordan Berry y el long snapper debe ser en teoría Kameron Canaday aunque usaron la séptima ronda en Colin Holba.

En resumen: Mientras Bell, Big Ben y Brown sigan sanos no tienen por que preocuparse. Pero cuando se les exija a los demás pues, híjoles chatos. Estarán en serios problemas. Repito: por nombres no deberían de tener ningún problema para conseguir 11 victorias sin despeinarse, pero todo se queda en supuestos y potenciales. Sin embargo si siguen así, el día que se les caiga su torre de naipes van a sufrir bastante.


Correo: franciscolozano1321@gmail.com / Twitter: @clarkmorales

Comentarios

Entradas populares de este blog

Los Chiefs y su mesías

Previas de comodín (día uno)

La redefinición del quarterback... ¿O del sistema?